lunes, diciembre 31, 2007

Final del año

"Ni el pormenor simbólico
de reemplazar un tres por un dos
ni esa metáfora baldía
que convoca un lapso que muere y otro que surge
ni el cumplimiento de un proceso astronómico
aturden y socavan
la altiplanicie de esta noche
y nos obligan a esperar
las doce irreparables campanadas.
La causa verdadera
es la sospecha general y borrosa
del enigma del Tiempo;
es el asombro ante el milagro
de que a despecho de infinitos azares,
de que a despecho de que somos
las gotas del río de Heráclito,
perdure algo en nosotros:
inmóvil."

Poema de Jorge Luis Borges.

2 comentarios:

Centauro dijo...

Lo único que permanece siempre es el cambio constante, querido Facundo. El tiempo pasa y nos vamos poniendo viejos, pero siempre presentes.
¡Feliz año!
Y que siga el blog por muchos años más.

Facundo dijo...

Cuanta razón tiene don Centauro. Feliz año para usted tambíen.