Los dioses travestidos
El mito desarrollado a continuación corresponde a la mitología nórdica. Aunque lo había leído hace tiempo, me lo hizo recordar “El mundo de Sofía”, que leí recientemente. Aclaro que además de ser una buena historia, me resultó muy graciosa. Entenderán quizás por el título del envío.
Primero tenemos que presentar a Thor o Tor, como más les guste. Es hijo de Odín, que ocupa un lugar similar a Zeus en la mitología griega, y Frigga, diosa del amor, la fertilidad y la fidelidad conyugal.
Thor poseía un martillo, llamado Mjolnir, que significa “el destructor”. Cuando lo agitaba producía rayos y truenos. Por eso, la palabra noruega torden (truenos) significa “ruidos de Tor”. Se entenderá entonces porque era considerado dios del trueno, como también de la guerra. Además era venerado por los agricultores, ya que después de los rayos y truenos llegaba la lluvia. Viajaba por los cielos en una carreta tirada por dos machos cabrios voladores, Tanngrísnir y Tanngnjóstr, que podían ser asados y comidos por Thor y vueltos a la vida cuando los necesitara.
Primero tenemos que presentar a Thor o Tor, como más les guste. Es hijo de Odín, que ocupa un lugar similar a Zeus en la mitología griega, y Frigga, diosa del amor, la fertilidad y la fidelidad conyugal.
Thor poseía un martillo, llamado Mjolnir, que significa “el destructor”. Cuando lo agitaba producía rayos y truenos. Por eso, la palabra noruega torden (truenos) significa “ruidos de Tor”. Se entenderá entonces porque era considerado dios del trueno, como también de la guerra. Además era venerado por los agricultores, ya que después de los rayos y truenos llegaba la lluvia. Viajaba por los cielos en una carreta tirada por dos machos cabrios voladores, Tanngrísnir y Tanngnjóstr, que podían ser asados y comidos por Thor y vueltos a la vida cuando los necesitara.
Como en todas las mitologías, en esta también encontraremos seres malvados que amenazan con destruir el mundo. Éstos eran los Trolls (los gigantes), que pretendían raptar a Freya, diosa de la fertilidad. Si lo lograban, en los campos no crecería mas nada y las mujeres no darían mas a luz. Continuando con el plan que idearon, aprovecharon una ocasión en que Thor se había dormido y le robaron el martillo. Este se encolerizó tanto que sus gritos se escucharon por todo Midgar. Enseguida dio aviso a su amigo Loke, dios identificado con el fuego y el fraude, que pensó en pedirle las alas a Freya para poder volar hasta Jotunheimen (el hogar de los gigantes), y así averiguar si estos seres maléficos habían robado el martillo. Una vez llegado, Loke se encontró con Trym, el rey de los gigantes, que afirmó haber robado el martillo, pero que únicamente lo devolvería si le traían a Freya para que se casase con él.
Esto traía consigo una situación ambigua. Los Trolls se habían apoderado del martillo, y como poseía tal poder, controlarían con él al mundo de los dioses y los humanos. Si accedían al intercambio del martillo por Freya, la hierba en los campos se marchitaría y los dioses y humanos morirían.
Loke vuelve a Asgard, pensando que la mejor opción sería entregar a la diosa, por lo que le pide que se vista de novia. Ésta, enfadada, reniega casarse con un Troll. Ante tal negativa, tendrían que buscar otra manera de recuperar el poderoso martillo. La idea que surge de los dioses es que Thor se haga pasar por Freya, disfrazandose de novia, atándole el pelo y poniéndole piedras en el pecho para que parezcan senos. Thor accede, no de buena manera. Loke por ende, lo acompaña como dama de honor, por lo que también se disfraza de mujer.
Una vez llegados a Jotunheimen, los Trolls empiezan los preparativos de la boda. Durante la fiesta prenupcial, la novia (Thor), se come ocho salmones, un buey entero, y se bebe tres barriles de cerveza. Trym, el novio, quedó extrañado ante semejante mujer. Ante tal situación, la dama de honor (Loke) comenta que la supuesta Freya no había comido nada en ocho noches por la enorme ilusión que le hacia casarse con el rey de los gigantes, tranquilizando a todos los asistentes.
En un descuido, Trym levantó el velo de la novia para darle un beso, asustándose enormemente al ver los agudos ojos de Thor. Esta vez, Loke le dice a Trym que la novia tampoco había dormido nada en ocho noches por la emoción que le producia el casamiento. Cuando estaban por comenzar las nupcias, Trym ordenó que traigan el martillo y lo pongan sobre las piernas de la novia durante toda la ceremonia. Una carcajada retumbó en todo Jotunheimen, cuando Thor tuvo el martillo en sus manos. Se quitó el molesto disfraz que llevaba, mató primero a Trym y luego a todos los gigantes. Volvieron a Asgard, comidos, bebidos y con el martillo.
Esto traía consigo una situación ambigua. Los Trolls se habían apoderado del martillo, y como poseía tal poder, controlarían con él al mundo de los dioses y los humanos. Si accedían al intercambio del martillo por Freya, la hierba en los campos se marchitaría y los dioses y humanos morirían.
Loke vuelve a Asgard, pensando que la mejor opción sería entregar a la diosa, por lo que le pide que se vista de novia. Ésta, enfadada, reniega casarse con un Troll. Ante tal negativa, tendrían que buscar otra manera de recuperar el poderoso martillo. La idea que surge de los dioses es que Thor se haga pasar por Freya, disfrazandose de novia, atándole el pelo y poniéndole piedras en el pecho para que parezcan senos. Thor accede, no de buena manera. Loke por ende, lo acompaña como dama de honor, por lo que también se disfraza de mujer.
Una vez llegados a Jotunheimen, los Trolls empiezan los preparativos de la boda. Durante la fiesta prenupcial, la novia (Thor), se come ocho salmones, un buey entero, y se bebe tres barriles de cerveza. Trym, el novio, quedó extrañado ante semejante mujer. Ante tal situación, la dama de honor (Loke) comenta que la supuesta Freya no había comido nada en ocho noches por la enorme ilusión que le hacia casarse con el rey de los gigantes, tranquilizando a todos los asistentes.
En un descuido, Trym levantó el velo de la novia para darle un beso, asustándose enormemente al ver los agudos ojos de Thor. Esta vez, Loke le dice a Trym que la novia tampoco había dormido nada en ocho noches por la emoción que le producia el casamiento. Cuando estaban por comenzar las nupcias, Trym ordenó que traigan el martillo y lo pongan sobre las piernas de la novia durante toda la ceremonia. Una carcajada retumbó en todo Jotunheimen, cuando Thor tuvo el martillo en sus manos. Se quitó el molesto disfraz que llevaba, mató primero a Trym y luego a todos los gigantes. Volvieron a Asgard, comidos, bebidos y con el martillo.
5 comentarios:
Me acuerdo de haberlo leído en "El mundo de Sofía".
Nosotros, los griegos, tenemos a Tirerias, que si bien no era un dios supera la historia de Thor ya que no se disfrazó de mujer, sino que se convirtió en mujer y luego volvió a ser hombre. Además, parece que "la pasó bien" tanto siendo lo uno como lo otro, por eso después fue llamado por Zeus y Hera quienes discutían quien sentía más placer en el sexo, si eran los hombres o las mujeres.
Tiresias respondió por experiencia propia... y Hera lo dejó ciego.
Aunque me creía conocedor de la mitología griega, no sabia la historia que relataste recién. Por eso, como dije en otra oportunidad, es buena la interfase, por decirlo de una manera, entre “escritores” y lectores”, porque en definitiva, todos aprendemos. Voy a tratar de buscar y conocer esta historia que comentaste Centauro. Gracias.
Jajaajaja! Thor es mi dios.
Y el "Mundo de Sofía" mi Bilbia.
Saludos!
No me quiero imaginar que hubiera pasado si después de tomarse los tres barriles de cerveza se le hubiese escapado un eructo. Un personaje Thor.
Saludos también Lulet.
Qué ocurrencia! Un eructo?
Jajaajaja...
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